🌿 La Interpretación lo Es Todo: Cuando Leer la Escritura Moldea Cómo Vemos a las Personas

¿Qué pasaría si te dijera que la forma en que interpretas la Biblia también influye en cómo interpretas a las personas? 🌿 En esta reflexión profundamente personal, exploramos cómo nuestras experiencias, creencias familiares y filtros culturales pueden afectar no solo cómo entendemos la Palabra de Dios, sino también cómo juzgamos, amamos o rechazamos a quienes nos rodean. Este devocional te invita a examinar tu corazón, renovar tu perspectiva y permitir que el Espíritu Santo purifique tu lente espiritual. Basado en Mateo 7 y otras escrituras clave, descubrirás cómo Dios nos llama a ver con ojos de gracia, no de culpa. 💛

ENSEÑANZA DEVOCIONAL

Pluma Fiel

7/27/20256 min read

📖 Enfoque Bíblico (NTV)

“No malinterpreten por qué he venido. No vine para abolir la ley de Moisés ni los escritos de los profetas. Al contrario, vine para cumplir sus propósitos.”
— Mateo 5:17

“Han oído que a nuestros antepasados se les dijo: ‘No asesines. Si cometes asesinato, quedarás sujeto a juicio’.
Pero yo digo que, aun si te enojas con alguien, ¡quedarás sujeto a juicio! Si llamas a alguien ‘idiota’, corres peligro de que te lleven ante el tribunal. Y si maldices a alguien, corres peligro de caer en las llamas del infierno.”
— Mateo 5:21–22

“Cuando venga el Espíritu de verdad, él los guiará a toda la verdad.”
— Juan 16:13

“No juzguen a los demás, y no serán juzgados. Pues serán tratados de la misma forma en que traten a los demás.”
— Mateo 7:1–2

🌸 Reflexión: No Solo Heredamos la Escritura — Heredamos la Interpretación

Desde joven, fui introducida a la Biblia y a la fe pentecostal por mi abuelo. Él me enseñó las bases del cristianismo, y por eso estoy profundamente agradecida.

Aunque comprendía la fe pentecostal, en mi hogar inmediato no se seguían costumbres religiosas durante mi infancia. Más adelante, mi madre se convirtió al Señor y se unió a la iglesia pentecostal, ya cuando yo era adulta. Sin embargo, las creencias de mi familia extendida—especialmente sobre el alcohol—seguían teniendo mucho peso.

Una de esas creencias era que tomar alcohol era pecado. Y aunque nunca creí eso personalmente, ni juzgué a nadie por tomarlo, esa interpretación sí influía en cómo actuaba, especialmente con la familia.

Cada vez que recibíamos visitas en casa para celebraciones o comidas especiales, mi esposo y yo decidíamos no servir ni beber vino. No porque pensáramos que era incorrecto, sino por amor, respeto y, siendo sincera, temor a ser juzgados.

Mi esposo viene de una familia italiana católica, donde el vino no solo es normal, sino sagrado. Es parte de la hospitalidad, una tradición de reverencia y comunidad. Para él, el vino en la mesa es tan natural como el pan—una bendición. Pero para evitar conflictos o desaprobación, decidimos ocultar algo que en realidad no era ni pecado ni vergonzoso.

Con el tiempo, esa decisión trajo tensión, no con nuestras visitas, sino entre nosotros. No estábamos caminando con convicción personal—estábamos caminando con precaución. Y fue allí cuando el Señor comenzó a tocar algo más profundo en mi corazón.

El problema no era el vino—era el temor. Temor al juicio. Temor a decepcionar a las personas que más amábamos. Y en ese momento, empecé a ver las palabras de Jesús en Mateo 5:17–22 bajo una nueva luz:

“Han oído que se dijo… pero Yo les digo…”

Jesús no solo corregía el comportamiento—estaba corrigiendo la forma en que leemos la ley. Él nos llama a dejar la religión superficial para vivir una transformación del corazón.

🔍 Cuando la Mala Interpretación Afecta Nuestras Relaciones

La mala interpretación de la Escritura no siempre nace de malas intenciones. Pero sí puede traer miedo, culpa y división innecesaria. Incluso si en nuestro corazón no creemos una idea, cuando la tradición es fuerte y las voces son firmes, podemos actuar como si lo hiciéramos—solo para evitar el conflicto.

Eso no es libertad. Es temor disfrazado de paz.

Y ese temor puede impedirnos amar plenamente a otros—y también recibir amor.

📚 ¿Qué Dice la Biblia Sobre Juzgar a los Demás?

La Palabra es clara:

“No juzguen a los demás, y no serán juzgados. Pues serán tratados de la misma forma en que traten a los demás.” — Mateo 7:1–2
“Recuerda que todos tendremos que comparecer ante el tribunal de Dios.” — Romanos 14:10
“El Padre… le ha dado al Hijo toda autoridad para juzgar.” — Juan 5:22

Nosotros no somos jueces—Jesús lo es. Y Él es completamente justo y completamente lleno de gracia.

👨‍👩‍👧‍👦 Cómo el Juicio Afecta a Nuestras Familias

El juicio muchas veces empieza en silencio—en casa.

  • El familiar que se alejó de la iglesia

  • La persona que ve la fe de manera diferente

  • El hijo o hija que todavía está buscando su camino

A veces juzgamos por temor: “Si no digo algo, ¿estoy aprobándolo?” Otras veces, sentimos que nos juzgan por vivir diferente.

¿Y qué ocurre? Distancia. Incomodidad. Silencio donde debería haber conexión.

“En el amor no hay temor, sino que el amor perfecto echa fuera el temor…” — 1 Juan 4:18

Cuando el juicio guía nuestros pasos, el temor no está lejos. Y el temor no construye puentes—construye muros.

📱 ¿La Sociedad Actual Alimenta un Espíritu de Juicio?

Sí—más de lo que notamos.

Las redes sociales nos han convertido en consumidores constantes de las vidas ajenas. Vemos versiones editadas de la fe, convicciones filtradas, momentos espirituales seleccionados. Y sin darnos cuenta, reemplazamos la gracia con actuación y el discernimiento con comparación.

  • “Adoran con más pasión”

  • “Se visten más recatadamente”

  • “Su familia parece más espiritual”

El juicio no siempre necesita palabras—crece en suposiciones.

🙍🏽‍♀️ ¿Cómo Afecta Esto a los Jóvenes?

Los está agotando.

Esta generación crece con todo expuesto, todo compartido, todo criticado. Muchos jóvenes se alejan de la iglesia, no porque no crean en Dios, sino porque se han sentido observados, evaluados y malentendidos por quienes dicen seguirlo.

No necesitan más reglas. Necesitan relación.
No necesitan religión que hiere. Necesitan verdad que sana.

✨ ¿Cuál es el Mensaje de Jesús para una Generación Cansada del Juicio?

“Vengan a mí todos los que están cansados y llevan cargas pesadas, y yo les daré descanso.” — Mateo 11:28
“Dios no envió a su Hijo al mundo para condenar al mundo, sino para salvarlo por medio de él.” — Juan 3:17

Jesús no vino a crear críticos.
Vino a levantar discípulos.
No vino a condenar.
Vino a restaurar.

Al que se siente juzgado — Él dice, “No eres tu reputación.”
Al que se siente avergonzado — Él susurra, “Te veo y te amo.”
Al que juzga con rapidez — Él pregunta, “¿Permitirás que Yo examine tu corazón primero?”

🍷 Cuando la Libertad Se Convierte en Lucha

Aunque el vino y otras formas de alcohol tienen un lugar cultural y bíblico, también debemos hablar con honestidad: el alcohol puede ser mal utilizado, y cuando lo es, puede destruir vidas.

Si estás leyendo esto y batallas con el consumo excesivo, la adicción, o has experimentado trauma relacionado con el alcohol, por favor, escucha esto con amor:

No eres débil. No estás descalificado. No estás solo(a).

Jesús vino a liberar a los cautivos—incluyendo a quienes luchan con la adicción. Pero la libertad no viene solo por fuerza de voluntad. Muchas veces requiere comunidad, apoyo profesional y un proceso de sanidad.

📌 Posibles pasos hacia la libertad:

  • Hablar con un(a) pastor(a), amigo(a) o terapeuta de confianza

  • Unirte a un grupo de recuperación como Alcohólicos Anónimos

  • Buscar ayuda médica o psicológica

  • Incluir a la familia en tu proceso

  • Orar cada día por sabiduría, fuerza y dirección

  • Saber que la gracia de Dios cubre cada paso

No estoy promoviendo el uso del alcohol. Estoy rompiendo la vergüenza y compartiendo verdad bíblica.
Jesús es nuestro sanador, redentor y libertador.

“No se emborrachen con vino, porque eso les arruinará la vida. En cambio, sean llenos del Espíritu Santo.” — Efesios 5:18
“El vino produce burlones; el alcohol provoca peleas. Los que caen bajo su influencia no son sabios.” — Proverbios 20:1

📝 Reflexión Personal: Juicio y Gracia

  • ¿Qué creencias heredadas necesito examinar a la luz de la enseñanza de Jesús?

  • ¿He cambiado mi comportamiento por temor a ser juzgado(a)?

  • ¿Estoy leyendo la Biblia para conocer a Jesús—o para confirmar lo que me enseñaron?

  • ¿He dejado que el temor al juicio guíe mis decisiones?

  • ¿A quién he juzgado en silencio, y cómo puedo orar por esa persona hoy?

🙏 Oración

Jesús, Tú eres la Palabra Viva.
Ayúdame a leer Tu verdad con humildad.
Donde he sido malinterpretado(a), trae sanidad.
Donde he vivido con temor, trae libertad.
Donde la tradición me ha guiado, que me guíe Tu Espíritu.

Ayúdame a dejar de juzgar a los demás.
Examina mi corazón y muéstrame dónde las suposiciones o creencias heredadas han nublado mi amor por las personas.
Enséñame a ver a los demás con Tus ojos—no con crítica, sino con compasión.
Hazme lento(a) para hablar, rápido(a) para escuchar, y abundante en gracia.

Que mi vida y mi hogar reflejen gracia, no culpa.
Amor, no legalismo.
Y que mi mesa siempre Te refleje a Ti.

Amén.

💌 Continuemos la Conversación

¿Alguna vez has cambiado tu forma de actuar por miedo a ser juzgado(a)?
¿Has vivido tensiones por creencias heredadas dentro de tu familia o corazón?

No estás solo(a). Muchas personas han caminado este mismo camino—tratando de honrar a seres queridos mientras buscan vivir en la libertad que Jesús ofrece.

Si este devocional tocó tu corazón, te invito a dejar un comentario abajo. Puedes compartir tu historia, tus pensamientos o incluso una oración. Este espacio es seguro, lleno del Espíritu y cubierto por la gracia.

Tu voz importa. Tu corazón es visto.
Y tu caminar es parte de algo sagrado.

Caminemos en verdad—sin miedo, sin vergüenza, y con Jesús en el centro. 🤍

✝️ Por favor, comparte palabras de aliento basadas en la Palabra de Dios.

Todos los comentarios son revisados y deben estar alineados con nuestra misión centrada en Cristo.
¡Gracias!