Testimonio: Mi Encuentro con un Ángel

📖 Introducción: Cuando Dios Envía Ayuda

Descubre el testimonio real de una niña perdida… y la presencia de un hombre que desapareció sin explicación. Un ángel. Este encuentro no solo trajo consuelo en un momento de angustia, sino que encendió una búsqueda de por vida por conocer a Dios más profundamente. Que esta historia fortalezca tu fe y te recuerde que Dios siempre está cerca.

🕊️ Mi Historia: El Día que Dios Me Alcanzó

La historia que estás a punto de leer es profundamente personal. Por muchos años, solo la compartí con algunos miembros muy cercanos de mi familia. Es la historia de cómo comencé mi caminar de fe — un viaje marcado por temores, cambios, y una intervención divina que cambió mi vida para siempre.

Cuando era niña, nos mudamos a una nueva ciudad. Ser la niña nueva en la escuela fue difícil, pero un día una compañera me invitó a su casa. Después de la escuela, tomamos el autobús juntas, pero cuando su madre llegó a casa, se enojó. Me pidieron que me fuera de inmediato. No sabía cómo regresar a casa. No recordaba la dirección. No conocía el vecindario. Estaba perdida y con miedo.

Llorando, caminé hasta una intersección. Fue allí donde un hombre mayor se me acercó. Me preguntó por qué lloraba, y sin dudarlo, le conté mi situación. Me pidió una descripción de mi casa y me aseguró que me ayudaría a encontrarla.

No sé por qué confié en él tan fácilmente. Tal vez porque se parecía mucho a mi querido abuelo, quien me enseñó sobre el Señor y me leía la Biblia. Mientras caminábamos, mi miedo desapareció. De repente, reconocí la calle: ¡estaba cerca de casa! Corrí los últimos pasos. Mi madre estaba afuera, preocupada. Le conté lo que había pasado, pero al mirar atrás para agradecer al hombre… había desaparecido.

Nunca supe cómo logró encontrar mi casa con tan poca información. Pero ahora sé con certeza en mi corazón que ese hombre fue enviado por Dios. Fue un ángel.

🌿 Reflexión Devocional: Dios Siempre Nos Encuentra

La Palabra de Dios nos recuerda que “Los ángeles del Señor son un escudo que nos rodea y nos salva” (Salmo 34:7, NTV). Aunque no siempre los veamos, Dios envía ayuda en los momentos más vulnerables. A veces, esa ayuda se presenta de maneras inesperadas, como un hombre amable en una calle desconocida.

Nuestro Dios es un Padre amoroso. Él no nos abandona. Incluso cuando no sabemos cómo orar, cómo volver, o qué decir… Él ya ha enviado la respuesta. Así como guió mis pasos ese día, Dios quiere guiarte a ti también — de vuelta a casa, de regreso a Su presencia, a los brazos seguros de Su amor.

🙏 Oración Final

Amado Padre Celestial,
Gracias por Tu constante cuidado y protección. Gracias por enviar ayuda cuando más lo necesitamos — a veces en forma de personas, otras en forma de ángeles. Ayúdame a confiar en que Tú estás presente, incluso cuando me siento perdida. Fortalece mi fe y abre mis ojos para reconocer Tu mano en cada momento de mi vida.
Enséñame a depender de Ti, a buscarte con todo mi corazón, y a recordar que nunca estoy sola. Que este testimonio inspire a otros a ver Tu fidelidad en sus propios caminos.
En el nombre de Jesús,
Amén.

📌 ¿Te ha tocado este testimonio?

Te invito a compartirlo con alguien que necesite recordar que Dios no nos deja solos. Y si tienes una historia personal de cómo Él te encontró, ¡me encantaría leerla!

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Porque Sus palabras… dan vida.